Cómo mejorar la pareja: mujer de Capricornio y hombre de Piscis

Cómo mejorar la relación, la pareja, el amor y el sexo entre signos

Mujer de Capricornio - Hombre de Piscis

Cómo mejorar la relación de pareja:
Mujer del signo Capricornio - Hombre del signo Piscis
El vínculo capricorniana-pisciano tiene una buena compatibilidad amorosa, pero no demasiado. ¡Pero a no decepcionarse! se puede lograr una relación estable y feliz con esfuerzo y dedicación.

Lo bueno es que la capricorniana encuentra relativa paz en un hombre de Piscis. Los problemas que surgen en esta relación suelen ser más bien íntimos, especialmente dudas. La Capricornio es una mujer indecisa, siempre quiere tomar la decisión correcta y eso puede hacerle perder mucho tiempo valioso.

El hombre de Piscis, por su parte, tiene una personalidad que puede hacer sufrir a la capricorniana. De todas maneras el sexo, al menos al comienzo de esta relación, es maravilloso...

Con el tiempo puede decaer esa pasión, por lo tanto es importantísimo no ser egoístas en la cama; deben encontrar placer al dar y recibir, en todos los sentidos que la imaginación y las fantasías puedan concebir. Al sexo deben poder disfrutarlo los dos. Esto será muy importante para mantener la pareja sana por muchos años.

En las relaciones de pareja capricorniana-pisciano de larga duración suele aparecer un problema muy frecuente: huir o negar los problemas que pasan. La sinceridad mutua es fundamental para comenzar a solucionar los problemas de pareja.

Jamás callar un problema o algo que moleste, todo se debe hablar civilizadamente. El problema de ocultar es que se acumulan los problemas y luego, tarde o temprano, termina estallando, probablemente con peores consecuencias.

La convivencia puede ser difícil en esta relación también, dado que ambos tienen costumbres muy diferentes.

En las relaciones de pareja capricorniana-pisciano que ya llevan varios años puede surgir un problema importante: el aburrimiento.

Deben buscar juntos actividades más divertidas y diferentes, es bueno animarse a hacer cosas que jamás se les ocurriría: practicar juntos un deporte, cultivar una planta y esperar su hermosa flor, compartir un libro y luego comentarlo entre ustedes, etc. Son pequeñísimos cambios que ayudan a salir de la rutina.